jueves, enero 12, 2006

cambiando un actitud

Soy muy afortunado porque mis clientes son agradable y me caen muy bien.

Exept uno.

Ayer, tuve una reunión con ese cliente. Mi intención era decirles que no trabajé para ellos en 2006. Incluso tenía el nombre y número de teléfono para un reemplazo -- una de mis ex-estudiantes. Ella haría un buen trabajo para ellos, y yo nunca tendría que verlos otra vez. ¡Un plan perfecto! Me preparé mentalmente para la reunión, y me sentía fuerte y confidente cuando llegué.

Pero cuando llegué, estaban todavía hablando con la grafista. Me dijeron que tomar parte en la discusión, así que me tiré en medio de una discusión sobre el informe annual (annual report?) próximo. No tenía ninguna oportunidad de decir que "no trabajaré en su informe anual éste año."

Entonces, después de que saliera la grafista, no podría decirlo tampoco, porque lo había discutido ya activamente, no? Me derrotaron. Ganaron, aunque no sabían que había una batalla.

Ahora he acordado hacer una docena boletines, un artículo de revista, y todas las palabras para el informe anual. Ja ja ja. ¡Perdedora!

Pero durante la reunión, me da cuenta de solamente tengo que cambiar mi actitud. Haré el trabajo, que no es trabajo difícil, y tomaré su dinero. No me preocuparé que no siguen mis recomendaciones para la comunicación excelente. No me importa que el informe anual es un piece of crap.

El año pasado, intenté convencerles que convengan las cosas que mejorarían su comunicación. Intenté mantener las mismas mayores niveles de la comunicación que doy a mis otros clientes. Convendrían siempre, después harían el contrario.

Ahora, me convencí de mi error. Tengo que hacer simplemente el trabajo, tomo el pago, y no me preocupo si es excelente o no. Tomaré su dinero. No seré orgulloso del trabajo que hago para ellos, y no lo mostraré a otros clientes. Pero tomaré su dinero. El trabajo que hago para ellos pagará un viaje a México, y más.

Continuaré dándoles mi mejor consejo profesional, por supuesto. No sacrificaré mi ética – siempre voy a darles mi mejor consejo. Pero no me importara que ellos no lo siguen. ¿Pienso que esto será mejor para mi salud mental, no?

5 comentarios:

LiCoCi dijo...

Interesante tu post Ruth, lo único que podría concluir es con una frase muy común en mi país que dice:"dondequiera se cuecen habas". El significado sería dondequiera ocurren esas cosas. Lo más sabio es lo que mencionas,: no tiene caso "tomarlo tan a pecho" (involucrarse tanto), pues nunca vas a cambiar sus criterios y finalmente al cliente, lo que pida. Al final l que presenten es su responsabilidad.
Me sentí identificado en tu experiencia, aunque adaptada lo que yo hago. Un abrazo para ti y para Fred.

Mario dijo...

El que ríe al último, ríe mejor...

Ruth and Fred dijo...

Ah gracias Don Lino, por su apoyo y por nuevo vocabulario!!
Jijiji Mario, es también un dicho en español? "He who laughs last, laughs best!"
Marisol, no te preocupas, pookie! Ahorramos el dinero así que podemos visitar alguna vez este año.
Saludos!!

LiCoCi dijo...

Ruth, no pude encontrar tu email, así que aprovecho este medio para darte las gracias, a ti y a Fred, por sus regalos. Fue hasta anoche que Talía desempacó (unpacked) sus cosas y me entregó los regalos. Ya me dispongo de inmeadiato a saborear la mermelada de tu huerto (it was very touching). A nombre de Pupi, mi esposa y mi suegra, y por supuesto mio, les damos las gracias por sus atenciones y su amistad. Un abrazo a los dos.

Ruth and Fred dijo...

Eran regalos muuy pequeños, pero estoy muy contento que les gustan. Estábamos tan feliz encontrar a Thalía y Sergio -- son muy amables. Agradézcalos por favor por ser nuestras mulas. jiji
Abrazos a ustedes!
Acabo de enviarle mi dirección del e-mail.